Brócoli y calabaza:
Potencian nuestras defensas frente a todo tipo de enfermedades.Así, se recomienda la presencia de verduras de la familia de las coles como el brócoli 2 o 3
veces a la semana para prevenir el cáncer.
La calabaza y el brócoli tienen betacarotenos, precursores de vitamina A, vitamina de efecto antioxidante que nos ayuda a hacer frente a las enfermedades típicas del otoño como los catarros y los resfriados.
Estas verduras nos ayudan a combatir el estreñimiento y tienen un efecto depurativo importante, ayudándonos a evitar la retención de líquidos.
Para que mantengan mejor sus propiedades se recomienda cocinarlas como en esta receta, al vapor.
Tocineta:
Tiene grasas que aumentan el colesterol y mucha sal, de manera que será un alimento de consumo ocasional para así mantener sano el corazón.Piñones:
Los piñones representan a los frutos secos que deben estar presentes 4 veces a la semana, siendo muy beneficiosos para personas con mucha actividad, tanto física como mental.Tienen grasas que hacen que tengan muchas calorías pero son buenas para bajar el colesterol y mejorar la circulación.
Queso rallado:
Añadir queso a los platos nos ayuda a mejorar su densidad nutricional, aportando proteínas de calidad, grasas, vitaminas y minerales necesarios para que se realicen correctamente todas las funciones del organismo.Se recomienda usar queso en la cocina para personas mayores y niños en crecimiento con poco apetito.
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