Para 2 personas
Ingredientes:
- 2 Cuartos traseros de pollo
- 2 Dientes de ajo
- 4 ó 5 Patatas pequeñas
- 1 Cebolla
- Vino blanco
- Aceite de de oliva
- 1 lata de coca cola
- 100ml de ketchup
- ½ cubo de caldo de verduras
Elaboración:
Ante todo precalienta el horno a 200º. Ahora prepara las patatas, la cebolla y los ajos.
Pica la cebolla y dales un golpe a los dientes de ajo con la hoja de un cuchillo. Pela las patatas y tríscalas con un tenedor. Yo confieso que antes de esta receta no sabía lo que eran las patatas triscadas y es algo tan sencillo como patatas golpeadas o partidas a trozos con un tenedor para que suelten el almidón y así espesen más la salsa.
Ahora coge una bandeja de horno, echa las patatas, la cebolla y los ajos y vierte un poco de aceite de oliva, sal y pimienta. Remueve bien y añade un poco de vino blanco. Mete las patatas en el horno y deja que se hagan durante 10 minutos.
Mientras tanto coge el ketchup y la coca cola y mézclalos bien. Espolvorea el medio cubo de caldo y remueve bien. Vierte la mezcla en un cazo y deja que hierva dos veces y después baja el fuego y espera a que la salsa se reduzca 1/3.
Para entonces las patatas ya estarán fuera del horno y a la espera del pollo. Salpimenta los cuartos traseros y embadúrnalos con aceite de oliva (con un pincel de cocina o con las manos). Coloca le pollo en la bandeja con las patatas (el lado de la piel boca abajo). Vierte la mitad de la salsa sobre el pollo y las patatas y mete la bandeja en el horno durante 15 minutos.
Al cabo de ese tiempo saca la bandeja y dale la vuelta al pollo. Vierte un poco más de la salsa y vuelve a meterlo en el horno otros 15 minutos. Yo recomiendo en que los últimos 5-8 minutos combinéis la opción de horno y la de grill para que la piel y las patatas queden crujientes.
Trucos:
Si no tenéis caldo de verduras, podéis usar caldo de pollo. Es lo que yo hice en esta ocasión.
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